El Streptocarpus parfuflora es una maravillosa planta de origen africano que se caracteriza en que solo posee una única gran hoja de color verde más o menos oscuro algo quebradiza, y una larga, numerosa y delicada inflorescencia de color blanco, rosa o azul.
Su maravillosa floración la disfrutaremos durante toda la primavera y parte del verano y conforme se marchiten las flores, las iremos quitando una a una, sólo cortando el tallo cuando ya no le queden, o esté completamente marchito, pues éste puede ramificar y seguir regalándonos sus flores y agradable fragancia.
No es muy exigente en cuanto al riego, pero si en cuanto al agua, pues como otras muchas hermosuras, precisa de agua sin cal, y una humedad ambiental elevada. Se debe dejar secar el sustrato entre riego y riego y procurar no mojar la gran hoja para evitar manchas que la afeen y se puedan producir podredumbres no deseadas. El suelo debe ser muy ligero, con muy buen drenaje, algo ácido y al tener un sistema radicular muy superficial, no es necesario su transplante. Hay que guarecerla de los rayos de sol directos y situarla en un lugar bien iluminado y ventilado.
La tenemos en dos colores, en blanco y en azul.
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